La primera vez que leí un tebeo de El Guerrero del Antifaz tendría ocho o nueve años. El dibujante y guionista Manuel Gago fue el padre de un cruzado astuto y valiente, que luchaba, incansable, contra los musulmanes invasores. Quizá el paso del tiempo sea cruel con las historias de estos héroes musculosos e invencibles. No voy a entrar en el trasfondo de aquellas historietas ni en los valores que encarnaban sus personajes. Simplemente quise hacer un juego de palabras al elegir el nombre de esta bitácora. Que nadie vea en ello ninguna intencionalidad oscura.
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